cuarta entrega

a esa hora el céntrico hotel  estaría desierto.sobre el buró aùn  el sobre que desaparecería esa misma noche sin parecr que  tuviera   importancia-sabía de actos inevitables  en estos casos. al tomarlo en la  mano el día anterior comprendió que no necesitaba abrirlo.las palabras parecían brotar del papel y pegarse a su piel.formaba  parte del plan original aunque  era  casi un desertor...esta vez saldría con el sol,pensó estando ya  frente al espejo.al mismo tiempo se le vino a la mente sin saber porqué que  podía ser  la  vez última que mirara esa  estampa que mujeres como alicia habrían  buscado y tal vez querido ...  la barba...tal vez... la  había visto en su rostro a los 29;  repasó las formalidades del sombrero mexicano.en su mente trataban de acomodarse  palabras (o eran otros quienes sin darnos cuenta las empujaban junto a los pensamientos  a  nuestras mentes siempre expuestas  como parecía sugerir una de las caobillas?)que más tarde pasarían por su mente por dejárselas  a las mujeres ,especialmentea  la señora que abajo, en la sala estaba sentada por la tarde  frente al televisor .
eran las diez de la mañana cuando estaba de cara al  ciprés .su vista apenas al ras del techo de las casas que se encontraban mirando al norte;encontró    el cerro que buscaba,lo  identificó por ser el único de perfil uraño y poblado de lajas,extraño en esta región   del altiplano.no ensayó la pregunta que hacía de vez en cuando *** por informarse a traves de él-podía ver al iztaccihuatl  y al popo-de las novedades de la ciudad  capital ;hizo otra:cómo puedo escucharte cerro amigo ?no lo había experimentado aún y sería así como comprendería la magia de una  mesoamericana para él ajena.fue  audible:escucha con atención a tu alrededor;te mudarás ,madurarás en poco  tiempo...dirigièndose al ropero abrió  un cajón conocido y tuvo a la vista los tubos de pintura abandonados.fue ahí que encontró el papel que después de leerlo ,haciendo un movimiento sorpresivo , depositó en la bolsa interior de la  chamarra a la altura del pecho.conocía las razones de que los tubos ni salieran, como tantas cosas lo habían hecho ni se ocuparan;el apunte era claro:pigmentos adulterados por los problemas  por los que atravieza el pais.ya para salir se paró frente al ùnico trabajo  que se ofrecìa a la vista;notó las superficies  agradecidas por el tratamiento del  carbón."el detalle " lo tenía enfrente:la flor en rama ,en el aire y más arriba emergiendo de una zona que parecía grabada en una  roca aérea la forma nahua,la llamada "elegante",en movimientos que como se había dicho parecían de danza ..;se acercó:una había sido pintada al pastel  ,cinco o seis  habían tomado forma de la materia de  la madera misma...tomó el cuadro entre las manos  y le dio vuelta.no gustaba de la caligrafía del pintor  ;esta vez asintió;leyó:Flor acompañada...,diciendo  para sí :bien por los  tres personajes,por la sala o el estudio inundado, pero más por los brillos variables en intensidad y tratamiento, pero más, por algo   que no hallaba cómo explicar : formas vegetales trabajadas con claroscuro,usando geometrías huidizas...en   el fondo donde  la madera había logrado  brillos para el desconocidos que no eran producto del contraste, de los que    el autor decía que se trataba del un regalo de  la madera misma, agradecida por haber encontrado una segunda oportunidad,surgía el rostro siempre extraño del Extranjero...lastima que lo que debío de ser un rayo irregular y luminoso quedó en lo que parecía una rama insustancial,dijo en voz alta y abandonó el lugar precipitado  y sin vover el rostro  deteniéndose hasta la avenida  ya  atestada que bordea la huerta del aeropuerto.
fue cuando vio los autos , bien conocidos por sus características sofisticadas,que para hacer la ronda conocida-sabìa que muchos de sus conductores  llevaban las manos olorosas a polvora,con lo que eso indicaba en  clave policiaca  .- eran contratados por  dos de las ciudades más importantes del continente para este caso especial que llevaba integrado a su clave de ordenamiento general la palabra"intelectual"..y, pensando en la mujeres dio media vuelta  dicendo en voz alta:dònde se habrá metido este pendejo! el policìa de turno,al tanto,intercambiò una mirada de inteligencia con el que estaba  unos pasos avenida abajo  (borrador)